Material de primera.
El presidente del Senado, aristócrata y arquitecto, aseguraba esta semana que él desconocía que hubiese que declarar el sobre de 24.000 que le pasó el partido. Toda una sorpresa.
El gerente del PSOE adjudicó un millón al socio de su hijo. Seguramente él tampoco sabía nada.
Ana Mato no es la excepción, sino la regla. ¿Pero por qué van a saber los ministros más que Messi con cuatros balones de oro?
Al padre de Báñez lo procesa la jueza Alaya doce años después de morir. Ahora en el puesto están sus hermanos. Pero seguramente Báñez ni siquiera sabía que tenía hermanos.
Dimite un diputado de BNG tras llamar a la vicepresidenta “chochito de oro”. Una cosa es el error de defraudar al fisco y otra llegar a la grosería.
CIU no apoya el acuerdo de PP-PSOE pero votará a favor. No trate de entenderlo, podría ser peor.
Obama espía al mundo. Pero, claro, hay que disfrutar de ese pequeño lujo de que te espíe un Premio Nobel de la Paz.
Tres primas del rey imputadas en un caso de blanqueo. Las primas de riesgo suben, esta vez al estrado.
Urdangarín invitaba a políticos a comer y luego les pasaba la factura; se desgravaba las canciones de iTunes; tenía un negro; facturaba trabajos no realizados… Este sí que sabía menos que nadie. Bueno, que nadie no. Aún queda la infanta.
Varios imputados de los Eres han cobrado cesantías; y la vida ‘vida laboral’ de Bárcenas –casi tan interesante como su expediente policial- indica que el PP mentía porque seguía a sueldo. Sorprendentemente aún nadie ha propuesto que pongan una casilla en la declaración de la renta para marcar Gürtel o Eres. Por tantos.
A González Pons, el partido le paga un piso mientras él cobra del Congreso dieta de alojamiento. Pecata minuta. La ex ministra Elvira Rodríguez, presidenta del Mercado de Valores, tiene cinco casas y también cobra la dieta. Eso es nivel.
Guindos cree que es difícil explicar que desaparezcan 3000 millones de Bankia. Quizá un poco difícil sí.
Blesa, ex capo de Bankia, va a prisión. Y la gente está indignada. Con el juez.
Enrique López, propuesto por el PP para el Tribunal Constitucional; y Conde Pumpido por el PSOE. Se ve que ambos quieren evitar como sea el riesgo de que la Justicia pueda parecer independiente. Eso sería catastrófico.
Oír a Floriano hablar de ética y a Susana Díaz sobre transparencia. Después de eso Shaolín ya no parece un tipo tan extravagante.
Así que cuando se lee que Chamizo va a investigar la relación entre la política y la droga, primero piensas “menudo disparate”. Pero después más de uno se preguntará sarcásticamente si a esa gente no le estarán pasando un ‘material de primera’. Como decía Sherlock Holmes, una vez eliminadas todas las hipótesis menos una, solo esa puede ser la explicación correcta, por descabellada que parezca.
