viernes, 7 de diciembre de 2012

Gallardón dará el Registro Civil a los registradores, que cobrarán aranceles

Con esta reforma el PP da un nuevo sablazo a  los ciudadanos que van a tener que pagar aranceles por obtener un certificado de nacimiento, defunción o sobre otros actos de estado civil a los registradores de la propiedad y mercantiles. 

Gallardon, ha abierto un nuevo frente que ha suscitado el recelo, cuando no el rechazo directo, de numerosos colectivos. Se trata de la nueva regulación que se está elaborando para la gestión del Registro Civil, encargado, entre otros trámites, de inscribir nacimientos, defunciones, matrimonios y divorcios. Desde el siglo XIX se encuentra adscrito a la Administración de Justicia, pero los planes del ministro son que pase a manos de los mil registradores de la propiedad que hay en España.

El temor de los jueces llega porque el propio borrador de la nueva norma recoge que los profesionales «sufragarán íntegramente los costes derivados de la prestación del servicio público del Registro Civil, incluyendo sus honorarios, mediante la aplicación de los correspondientes aranceles». De modo que las arcas públicas se ahorrarán el coste del servicio, pero a cambio la ciudadanía dejará de tener acceso gratuito a él.